Maratón
se escribe con D...
Septiembre 2 del 2012, las 4:10 hrs. Es momento de
levantarse, tomar la primer medida de glucosa, desayunar y vestirnos para irnos
a nuestro gran compromiso de cada año, correr el Maratón de la Ciudad de México
en su treintava edición, atrás quedaron los entrenamientos, la selección del
outfit, ir por el paquete y dejar por
escrito la promesa, observar la línea azul, la cena de carbohidratos, las
competencias previas donde una vez más pude romper mi record de Medio Maratón dejando
ahora el tiempo en 1:40:56 para la distancia de los 21K.
Todo esta listo, ya estoy reunido con mi equipo,
los Runners+ quienes siempre con esa gran camaradería que nos caracteriza,
comparto fotos, sonrisas, ideas y pensamientos, buenos deseos y sobre todo las
mejores vibras; estamos todos juntos, los que debutarán y los que refrendaremos
el titulo que pocos pueden portar, el titulo de “Maratonista”, algo a lo que
solo pocos se atreven.
Las 7:00 hrs. Y el balazo de salida suena para dar
paso a las grandes guerreras del asfalto, las mujeres que con todo pundonor,
orgullo, fuerza y valor van también a enfrentar a “La Bestia”, sin dar ni pedir
cuartel, para todas ellas mi admiración y respeto.
Las 7:15 hrs. Llego nuestro momento y aquí vamos en
busca de recorrer la mítica distancia de los 42 kilómetros con 195 metros, el
recorrido es pintoresco, lleno de cultura, belleza y esplendor, recorrer
avenidas emblemáticas, cruzar frente a monumentos históricos y sentir lo vivo
que esta nuestro Distrito Federal es algo que se tiene que respirar, que se
tiene que vivir.
A lo largo de toda la ruta voy encontrando a
grandes amigos y corredores, unos que me pasan y otros a los que yo paso, eso
no importa, lo bello es que vamos todos juntos, miles de almas con un mismo
objetivo vamos a lo largo del camino compartiendo más que asfalto, compartimos
sueños, ilusiones y un gran espíritu guerrero.
A lo largo de la ruta y en cada una de mis
mediciones todo esta en orden, valió la pena todo lo entrenado, vamos compensando
de manera perfecta, mantenemos el ritmo de carrera esperado y aún a pesar de
que me hicieron falta algunos entrenamientos, voy por toda la ruta muy bien,
contento, alegre, encontrándome en todo momento conmigo mismo, ¡carajo! Que
bello es saberte y estar consciente de que vas en cuerpo y alma al unísono.
El calor a lo largo de casi toda la ruta ya hizo
estragos, tengo mucha sed y el abasto del K37.5 se me fue, sé que más adelante,
en el K39 me espera algo formidable, la gran Porra Mitotera de los Runners+,
pasar al lado de ellos y recibir sus muestras de cariño, aprecio y apoyo hacen
que salga la reserva de combustible para tener un gran cierre.
El K40 ¡por fin!, un lugar para saciar mi
sed y refrescarme un poco, con paso firme aunque ligeramente cansado me enfilo
a la meta, mando mensaje por celular a mi familia avisando que estoy por
finalizar la prueba, la veo, esta frente a mí, el arco que sostiene el reloj
que marca tu tiempo de carrera, contengo la ganas de sprintar y solo mantengo
la firmeza de mi paso y por fin, una vez más con los brazos en alto, el pecho
erguido y la cara cubierta con una gran sonrisa atravieso el umbral mágico que
me refrenda como Maratonista, ello me trae un regalo extra, ¡un nuevo record
personal!, en tan solo 3:41:02 una vez más lo le conseguido.
Posterior a cruzar la meta y camino a recibir mi
medalla me encuentro entre el público asistente a mis amigas de EsTuDiabetes,
Claudia y Ernestina quienes me regalan una foto con una manta, regalo
inesperado y muy reconfortante, Gracias por tan lindo detalle.
Posterior a ello a reunirme con mis tres bellas
mujeres, esposa e hijas, quienes son uno de los estímulos más grandes que tengo
en la vida, esta es de las pocas veces que sin importar lo sudado que estoy, me
dan beso y abrazan ...Ja Ja Ja, pero bien ganado y merecido ese beso y abrazo
de cada una de ellas, las Amo.
Sin temor a equivocarme les puedo
escribir que alma, vida y corazón fueron desparramados por sobre toda la línea
azul, esa que marca la ruta de los 42K, una vez más, palabra empeñada, palabra
cumplida, ...Nos vimos donde siempre, ...¡En La Meta!
Muchos detalles están y viven en mi mente y
corazón, pero ahora quiero compartir contigo como se escribe la palabra
“Maratón”, una palabra que se labra y se forja a mano, mejor dicho, a pie.
Por todo lo vivido es que Maratón se escribe con D de ...
Destreza: porque al correr necesitas ir enfocado y con todos
tus sentidos puestos en la carrera, tu estrategia cualquiera que esta sea no
puede fallar y en caso de presentarse algo inesperado debes poder convertirlo a
tu favor o en el menor de los casos evitarlo o minimizarlo para que no afecte
tu resultado.
Disciplina: porque son muchos y variados los entrenamientos
que tendrás que vivir para enseñar a tu cuerpo y mente sobre fatiga extrema,
tendrás que acostumbrarte a horarios poco comunes, condiciones climatológicas
algo adversas, al dolor en tu cuerpo, a por un momento pensar que no lo
conseguirás, pero si te mantienes apegado a tu plan, esto ultimo no sucederá.
Dar: Tienes que estar dispuesto a entregar tu alma,
cuerpo y sobre todo tu corazón, serán muchos los días que tendrás que afrontar
de duros y extenuantes entrenamientos para poder cruzar la meta y ello implica
darse así tal cual, por completo, así que si apuestas a ganar, entonces juega a
ganar y dalo todo.
Distancia: Porque correr un maratón tiene como gran fiesta el
día que recorres 42 Kilómetros, pero recorrerás muchos más haciendo trabajos de
distancia, de velocidad y de cuestas, por momentos tu vida dejará de medirse en
tiempo para que ahora la veas pasar en función de varios cientos de metros
acumulados, disfrútalos todos.
Decisión: Todos tenemos un gran motivo para querer correr un
maratón y una vez que esté se manifiesta y te hace decidir enfrentar a “La
Bestia” del atletismo, te puedo decir que acabas de dar el primer y gran paso
para conseguir tal hazaña, pero ten claro que la decisión que acabas de tomar
es mucho más que correr muchos kilómetros, es sin duda una decisión que
cambiará tu vida en todos los sentidos y para siempre.
Demostrar: A ti mismo y a nadie más de que estas hecho,
correr es un duelo contra ese ser que se te planta enfrente todas las mañanas
en el espejo, ¿Quieres derrotarlo?, pues enfréntalo con cada entrenamiento dando
lo mejor de ti y llegado el gran día, sal y rómpete el alma, el cuerpo y el
corazón para vencerte, si así lo haces, seguro ganas.
Deseo: Puede ser que quieras ponerte a prueba, que tu
amor al deporte te haya llevado a querer vivir esta experiencia llamada maratón
o puede ser cualquier otra cosa que te inspire, lo importante es que es “tu
deseo” correr un maratón y eso querido amigo, es querer reir y llorar, gozar y
sufrir, en una palabra, es querer vivir. ¿Acaso hay una mejor manera de querer
vivir que haciendo realidad tus deseos?, definitivamente no la hay.
Disfrutar: Correr el maratón no es fácil, ya sabemos todo lo
que implica, pero con todo lo extenuante que es esta prueba no se trata de
ninguna manera de que esto se convierta en un calvario, al contrario, en todo
momento debes, a pesar de lo duro de los entrenamientos o lesiones que en el
camino pudieras encontrar, disfrutar al máximo cada momento vivido. Lo más
importante, el gran día solo dedícate a saborear todo lo que te ofrece el
maratón, desde el balazo de salidas hasta que hayas cruzado la línea de meta,
atesora y guarda cada uno de esos momentos en tu corazón, correr un maratón es
sin duda inolvidable, de ti depende de que sea una experiencia ciento por
ciento satisfactoria y placentera.
Dios: Sin importar tus creencias religiosas o tu
espiritualidad, agradece a ese ser supremo que te permitió vivir esta gran
experiencia, nada es obra de la casualidad pero si de la causalidad. Yo doy
gracias por la gracia que me fue concedida de seguir con vida y poder a través
de esta pasión del Running aprender de la vida y de lo que soy en ella, también
le agradezco la gracia de que pueda yo compartirlo contigo a través de estas
líneas.
¿Y porque no?, ...¡Claro! por instantes
te siente eso y más; yo también me he sentido Dios del Olimpo con cada meta
cruzada y más si acabo de devorar los 42 kilómetros con 195 metros, es un
instante que a la lente de una cámara fotográfica dura no más de 2 segundos
pero imborrable en mi mente y sobre todo en mi corazón.
Dedicatoria:
Siempre a lo largo de la ruta van en mi mente y corazón la familia y los
amigos, todos ellos que sin tener la obligación de hacerlo siempre me alientan
con alguna frase, algún “like”, de verdad, el camino es más fácil y llevadero
cuando uno se sabe querido por tanta gente, Gracias por dedicarme su tiempo. Yo
les dedico con todo gusto este gran esfuerzo como retribución a sus finas y
distinguidas atenciones, también lo dedico a aquellos que al igual que yo viven
con algún padecimiento crónico y no pueden valerse por si mismos, así como a
aquellos que no se han atrevido a tomar el control de su enfermedad.
Pero especialmente lo dedico a una de las
mujeres más importantes en mi vida, a alguien que me ha llenado de cariño y
ternura, de cuidados y que por ella es que sigo aquí vivo y corriendo, a mi
bella esposa Patty con todo mi amor y cariño van estos 42 Kilómetros con 195
metros. ¡Gracias!
Diabetes:
Correr un maratón con Diabetes significa:
Monitorear niveles de glucosa antes, durante y
después de entrenamientos y competencias.
Hacer ajustes en la alimentación para mantener un
adecuado consumo de carbohidratos conforme al plan de entrenamiento avanza y
que ello no impacte mis niveles de glucosa.
Ajustar la toma de medicamento, especialmente en
los días de entrenamientos matutinos y de mucha distancia.
Estar consciente que todo mi organismo se encuentra
en equilibrio manteniendo en todo momento presión arterial, lípidos y peso
corporal en niveles normales.
Jugar al alquimista para encontrar la mezcla
adecuada entre agua y bebidas isotónicas que permitan mantener niveles de
electrólitos, aporten energía e hidraten sin que ello implique un riesgo para
mi salud.
Experimentar con dulces, con sus diferentes
gramajes, sabores y presentaciones que me ayudaran a compensar posibles
hipoglucemias sin que estas se conviertan en hiperglucemias.
Demostrar al mundo que “Con Diabetes Se Puede”
Mi Diabetes, compañera de por vida desde hace 6
años que en todo momento me haces ser y estar consciente de mi cuerpo, de mi
espíritu, de mi vida; gracias a ti, he podido enfrentar y de a poco, derrotar a
todos y cada uno de los demonios que a veces me atormentan.
Correr un maratón al menos una vez al año, más que
un reto, es un tributo para todos aquellos que me siguen y apoyan de manera
incondicional, familia y amigos incluidos.
Correr un maratón al menos una vez al año, más que
un reto, es una confrontación contigo para recordarte que no me vas a vencer,
sé que todos y cada uno de los días de mi vida estas a la espera del mínimo
tropiezo de este ser que en el que habitas, pero que de ninguna manera
conseguirás causar daño alguno porque el control es mío.
Correr un maratón al menos una vez al año, más que
un reto, es un homenaje a mis seres queridos que en todas y cada una de mis
carreras cuidan mis pasos desde la otra vida, Abue Efi y Papá Beto, por Ustedes
es que siempre llego a la Meta y para Mi, mi familia y mis amigos es que
siempre llego a la Meta, gracias por su protección, sin duda un bello regalo.
Nos vemos en el Maratón 2013, gracias por tu tiempo
y por leer.
PD ...a los que directa o indirectamente (e incluso
y sin previo aviso de parte mía) colaboran con sus fotos ¡Muchas Gracias! Por
captar con la lente bellos y gratificantes momentos.